ACTUALIDAD

ACTUALIDAD (04-05-2007)

Fuente: La Voz de la Región

Aniversario de la firma Ramos Hnos.

Medio siglo de vida comercial

La Argentina estaba empezando una nueva historia, San Carlos era un pueblo pequeño, de gente buena y trabajadora. Donde cada vecino era un familiar más y el centro de reunión social era el añorado Cine Rivadavia y el tradicional bar de "los Turcos" aún permanecía con las puertas abiertas.

 

Fue así y en este ámbito como dos jóvenes pujantes, con ganas de progresar comenzaron a forjar hace cinco décadas el sueño de tener su negocio propio.

 

Hoy, a pocos días de soplar la velita n° 50 hablamos con Aldo y José "Chacho" Ramos. Los hermanos nos cuentan sus vivencias a través de estos años de trabajo ininterrumpidos en ciudad.

 

--¿Dónde empezó Ramos Hnos., fue aquí en este lugar, en este espacio físico?

 

--No. no. Nosotros empezamos en la vieja casa de Don Pedro Bessone, la que le decían el "conventillo de Bessone", en San Martín 289. Ahí empezamos. Estuvimos desde el 2 de mayo de 1957 hasta el 30 de junio 1968. Desde aquella fecha hasta ahora estamos en el local actual, que era de mi papá y nosotros lo fuimos refaccionando de a poco.

 

--¿Y por qué decidieron trasladarse desde el conventillo hasta aquí? ¿Por qué este local era de su papá y aprovechaban esa situación?

 

--Nosotros nos iniciamos en "Conventillo" porque mi abuela tenía un negocio en frente y no queríamos chocar por lo que alquilamos el local. En el año "68, vino la ley de desalojo para el comercio -bendita la hora que vino- y nos mudamos acá. En un principio nos iniciamos con calzado solamente y con el correr de los años anexamos ropa y cosas de deporte, ya que habíamos arreglado y ampliado el salón.

 

--¿Y se sintió el cambio cuando se mudaron?

 

--Al principio si, pero luego y de a poco se fue normalizando. Nuestro camino, nunca fue de rosas, nosotros hemos atravesado momentos dificilísimos, muy difícil y gracias a Dios, con constancia los estamos superando.

 

-- Y ¿se han adecuado a los tiempos que corren? ¿Nunca se quedaron en el tiempo?

 

--Si, por supuesto. También fuimos anexando todo el tema de bochas, vendemos mucho de esto, También tenemos todo lo que sea necesario para el bochófilo.

 

--¿Cuál fue la época más difícil para Ramos Hnos. y cual fue la más floreciente?

 

-- La más difícil fue cuando vino la convertibilidad. Y la más floreciente fue hasta el año "76 Después de la convertibilidad las ventas se vinieron abajo, ahora gracias a Dios estamos mejorando y estamos trabajando bastante bien. En este negocio hay una particularidad, nosotros les hacemos chistes a los clientes pero se van contentos, en cambio en otros negocios se van con la cara larga.

 

--En esos momentos difíciles ¿se pensó en cerrar el negocio y rumbear para otro lado?

 

--A la edad que nosotros teníamos, no sabíamos que hacer, estábamos completamente desorientados. Imagínate que cuando nosotros empezamos, uno arreglaba zapatos y el otro se encargaba de atender y comprar.

 

--Es sabido que el club de sus amores es el azul y oro ¿han ganado o perdido clientes por estar tan identificados con Boca?

 

-- Ja, ja, ja. Te puedo contar una anécdota por este tema, resulta que una vez vino un hombre y me dijo que venía a buscar algo que tal vez aquí no tienen porque son de boca, el veía la foto que estaba en el escritorio. Entonces yo le dije, mire acá tenemos tantas cosas, quisiera una camiseta de River, entonces yo me largué a reír y le dije faltaría que hagamos distinción de colores en el negocio.

 

Una vez alguien me pregunto que era y le dije que era de River. de Boca, San Lorenzo, Colón, Unión, Argentino, Central, pero en el negocio pero afuera es otra cosa.

 

Hay que adaptarse a cada cliente, si tiene campo hay que hablar de campo, si quiere hablar de deporte hablamos de deporte, en fin hay que tener todos los temas la días.

 

Mi viejo era muy fanático de Boca, yo no soy tanto.

 

--Ustedes deben ser las únicas personas, aquí en San Carlos, que han comenzado un comercio y siguen al frente.

 

--Sí, porque hay otros negocios que los empezaron los padres y hoy continúan. Lamentablemente ahora no tenemos quién lo continúe. Vamos a seguir hasta que las velas ardan.-